PERFILES DE NUESTRA HISTORIA: MANUEL JESÚS CLOUTHIER DEL RINCÓN “MAQUÍO”
Por Comunicación Social publicado 2019-05-14

POR JOÉ LUIS PÉREZ CASTILLO
Maquío (como se le conocía gracias a su hermano menor, que no podía pronunciar Manuelillo, como le decía su abuelo), vio la luz por primera vez un 13 de junio de 1934 en la ciudad de Culiacán, Sinaloa. Hijo de Manuel Clouthier y Cristina del Rincón, fue el mayor de sus tres hijos.
En alguna época se llegó a decir que Culiacán era de los Clouthier por las vastas extensiones de tierra de su familia, en las cuales se formó el espíritu libre de sus primeros años. A los 8 años de edad se mudó a la ciudad de Guadalajara a raíz de la separación de sus padres en lo que representaba un hecho poco común en la época.
Esta situación cambió el entorno en el que había vivido en Sinaloa en el cual se rodeaba de un campo exuberante alimentado por los ríos Humaya y Tamazula. En cambio, en Guadalajara experimentó algunas carencias. Ahí estudió en el Instituto Jesuita de Ciencias, yéndose al final a un internado militar en los Estados Unidos en el estado de California, lugares que sin duda forjaron su carácter.
En 1951 ingresó en el Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, llegando a éste con el grado de Teniente Segundo y con un gran gusto por el futbol americano. Al respecto él mismo decía que “abría boquetes para que la gente pasara”. Fue en esta etapa en la que aprendió las primeras lecciones de responsabilidad para con la sociedad pues entendía que no toda la gente contaba con las mismas oportunidades con las que conto él.
En 1957 se tituló como Ingeniero Agrónomo Fitotecnista y regresó a Culiacán aprovechando el auge en la cultura de exportación. Maquío emprendió sus nuevos negocios, sin pedir ayuda a su padre, rentando tierras y logrando las cosas por cuenta propia.
Sin embargo, no se sentía del todo satisfecho, por lo que a sugerencia de su tío Jorge, aceptó asistir a un curso llamado “Cursillo de Cristiandad” momento que marcó su vida y que propició su ingreso al Movimiento Familiar Cristiano, en el cual aprendió algunos principios de la Doctrina Social Cristiana que hizo suyos, tales como el respeto a la dignidad del individuo, la gesta del bien común y el cumplimiento de la responsabilidad social. Principios que desde entonces lo guiaron en el medio empresarial y en la política, situación que lo llevó a realizar acciones como la colocación de una escuela, servicios médicos y casas para sus trabajadores.
Fue tal su congruencia entre el decir y hacer, que sus colegas lo nombraron en 1971 Presidente de la Unión Nacional de Productores de Hortalizas, cargo con el que encabezó las condiciones de venta en el mercado de los Estados Unidos.
A pesar de sus éxitos como empresario, no se encontraba satisfecho con el bien que podía hacer por los demás, por lo que buscó a continuación la presidencia municipal de Culiacán por parte del PRI. Esta situación -manifestó él mismo más delante- no hizo que se considerara parte del mismo, ya que a pesar de pertenecer a una organización que estaba afiliada a dicho partido y eso lo afiliaba, entendía que solo dentro del sistema podría generar los cambios para los temas importantes de su municipio.
Siendo rechazado por las prácticas tradicionales del partido en el poder, Maquío se dio cuenta que, si quería cambiar las cosas tenía que ser de otra forma, por lo que se concentró en las organizaciones empresariales. Al respecto, su esposa relató en entrevista para el documental “La fuerza de un Ideal: Manuel Jesús Clouthier del Rincón “Maquío” que en una charla familiar les dijo: “No es por aquí por donde yo la voy hacer, yo me voy a dedicar a sentar las bases para que este país se democratice y voy a trabajar para que alguno de Ustedes llegue a ser Presidente de la República”– a lo que uno de sus hijos le dijo: -“Papá, pero no te pongas triste, que al cabo tú puedes ser Presidente de la Republica”- (Nacional, 2014)
Para ese entonces el Presidente Luis Echeverría Álvarez mantenía una política populista donde los problemas del país y los errores económicos, en su discurso, eran a causa de las malas acciones de los empresarios, así que con ese pretexto creaba empresas paraestatales y los amenazaba constantemente con la expropiación de tierras agrícolas. Situación que llegó a tal punto en que un comando armado asesino al Empresario Ernesto Garza Sada. Es en este difícil contexto que Clouthier es invitado a participar en COPARMEX.

Ernesto Ruffo Appel, primer gobernador panista en el País dijo de él: “Siempre demostró su interés por el que se lograra el progreso de la gente, en el ejemplo de que todos tenían que prosperar”.
En 1981 fue elegido para presidir el Consejo Coordinador Empresarial, responsabilidad desde la que enfrentó el mal gobierno de José López Portillo, que con sus acciones populistas como la de nacionalizar los bancos, demostró el poder absoluto que tenía para poder elegir de manera personal y voluntaria el destino de los 65 millones de mexicanos que había en ese entonces. Todo ello impulsó el que Maquío decidiera participar activamente en la política.
Es a través de un artículo que publicó en el periódico el Universal, que Maquío compartió una plática que tuvo con su hijo Manuel Clouthier Carrillo tras graduarse de la universidad le decía que le estaba tocando un México con menos oportunidades de las que le tocaron a él, a lo que Maquío respondió pidiéndole disculpas y comprometiéndose a luchar por construir un México mejor. Es evidente en este artículo su deseo por luchar por la democracia y de ser una fuerte oposición al régimen.
En junio de 1983 regresa a su tierra tras renunciar a la Presidencia de la COPARMEX, para hacer política a pesar de los costos y riesgos que esto implicaba para él, su familia y negocios.
En este mismo año, fue cuando Acción Nacional se levantó con diferentes victorias en Durango y Chihuahua tras la crisis económica que existía en ese entonces, con lo cual se inició una nueva etapa en el país.
Sin embargo, a pesar de saber, Manuel Clouthier del Rincón no consideraba que el PAN representara la oposición que se necesitaba para vencer al PRI. Sin embargo, esta forma de pensar cambiaria tras las elecciones donde participó su tío Jorge como candidato a la Presidencia Municipal de Culiacán, en la cual fue evidente el robo de la elección cometido por parte del partido oficial. Esta situación lo impulsó a que ese mismo año (1983) tomara la decisión de afiliarse al PAN tras haber leído la doctrina política de todos los partidos, siendo la de Acción Nacional con la que se identificó para el resto de su vida.
En palabras de Felipe Calderón Hinojosa; se registró como cualquier Panista, y aportó todo lo que sabía al PAN, era un tacle político, era un hombre que rompía todas las líneas y en 1984 se presenta abiertamente como Panista. (Nacional, 2014, Min 23.14)
En 1986 se convierte en candidato de Acción Nacional por la Gubernatura de Sinaloa, en esta elección compite contra Francisco Labastida Ochoa y contra toda la estructura del estado mexicano y de muchos empresarios. Él por el contrario, pagó su campaña con dinero propio y el ciudadanos que creyeron en él, pues el partido no contaba con los recursos ni la estructura suficiente.
Su campaña representó el inicio de una forma nueva de hacer política, ya que fue el primer candidato de Acción Nacional en recorrer todo el Estado de Sinaloa incorporando también nuevos elementos de mercadotecnica y publicidad. Sin embargo, fue su carisma lo que realmente rompió todos los esquemas, su congruencia, su discurso fresco, aguerrido y de entrega hizo que la gente se identificará con él, con su movimiento.

Como era de esperarse el 28 de octubre de 1986, dos días despúes de la elección y tras el fraude de la misma, Maquío llamó al “Mitin de la Victoria” teniendo como punto de reunión el costado de la Catedral de Culiacan. En el cual hizo un llamado de guerra, señalando con valentía el comportamiento antidemocratico del PRI.
Como un ácto simbólico, todos los asistentes se presentaron con un huevo y Maquío los invitó a depositarlo en un prado frente a la presidencia municipal de Culiacan, en alusión a que éste es el platillo favorito de los mapaches. Sin embargo ya estando en el lugar, la gente por sí misma arrojó todos los huevos al palacio municipal.
No ajenos al movimiento de Maquío en este mismo año, Francisco Barrios en Chihuahua y Rodolfo Elizondo en Durango, realizaron movimientos de resistencia civil pacifica, los llamados Bárbaros del Norte, quienes despertaron inquietudes dentro y fuera de Acción Nacional. Es en este contexto que los tres fueron llamados por el entonces Presidente del Partido Pablo Emilio Madero. Reunión en la cual Maquío le dijo al Presidente: “en este partido hay gavilanes y palomas, tú eres paloma y yo Gavilan”.
Los dos años años siguientes fueron de mucho movimiento político para el Maquío, quien se dedico a viajar por todo el país denunciando el fraude de la elección de Sinaloa, lo que lo proyectó como una fuerte figura opositora al regímen presidencialista de entonces. Todo ello hizo que varios líderes de Acción Nacional determinaran que la actitud retadora y desafiante de los Barbaros del Norte (expresión acuñada por el dirigente obrero priista Fidel Velázquez[1]), fuera la actitud del PAN en las elecciones del 6 de julio de 1988.
Es así que se convocó a Francisco Barrio y Manuel J. Clouthier a una reunión para resolver quien sería el candidato de Acción Nacional pues eran los panistas con más renombre y peso para ganar la contienda presidencial. En esta reunión Maquío, tras escuchar el mensaje de Pancho Barrios, se soltó en llanto a pesar de su temperamento fuerte y su pasión, haciendo referencia a la empatía que sentía por él, y en ese mensaje declaró: “Si se me necesita, aqui estoy”
En la Convención Nacional de Acción Nacional del 20 y 21 de noviembre de 1987, el Maquío hizo un compromiso con todos los mexicanos, luchar hasta su último aliento por ver a la patria vivir en libertad y democracia. La leyenda de Maquío habia nacido.
En la lucha desde la calle se podían observar los objetivos planteados por el Maquío en la campaña a la Presidencia de la República de 1988, los cuales se reconoce que fueron parte fundamental para el cambio de la vida democrática del país. Los objetivos fueron los siguientes:
- Ganar la Presidencia de la República
- Movilizar a los ciudadanos.
- Desmitificar a la Presidencia de la República
- Acercar nuevos liderazgos al partido y a la política.
En entrevista con (Ricardo Rocha, 1988), Clouthier hizo referencia a que un buen gobierno se mide por lo que hace el pueblo, no por lo que hace él.
Maquío dignifico la política, planteándola lejos del oficio sórdido con el que se le identificaba, convirtiéndolo en una fiesta, una fiesta donde participaban todos los ciudadanos.
Tras el cierre de los medios de comunicación al Maquío, hizo un llamado a la ciudadanía a que tomarán un engomado del PAN y en paz y libertad cambiarán juntos a México. De esta manera, la elección del ´88, se convirtió también en una batalla por la libertad de expresión
La empatía que sentía la gente por Maquío hizo que la campaña fuera financiada no solo por él, sino por miles de mexicanos que a donde iba, aportaban y le abrían las puertas. Uno de sus mítines más importantes en esta campaña fue el de cuatro caminos, el cual se realizó a propuesta de Don Luis H. Álvarez, siendo ésta la primera reunión pública en la capital del país. Dicho mitin revistió una importancia singular, ya que a pesar de que algunas voces al interior del partido que decían sería un fracaso al considerar que no se tenía presencia suficiente en la Ciudad de México, representó un parte aguas en la campaña. Fue en ese momento en el que frente a una gran cantidad de personas en el Zócalo capitalino pronunció una de sus frases inmortales: “Adelante, la victoria es nuestra, esto no lo detiene nadie ya”.
Llegadas las elecciones y a pesar del fraude orquestado durante la campaña por el PRI en todo el país, la gente salió a votar, alcanzándose un nivel de participación del 50.4%.
Es así que Maquío tomó la decisión de convocar a una reunión de tres candidatos a la Presidencia de la República: Doña Rosario Ibarra de Piedra, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y él mismo para denunciar en la Secretaria de Gobernación las anomalías de los comicios electorales. Este suceso es conocido hasta el día de hoy como “La caída del sistema” pues uno de los funcionarios de la CFE informo que el sistema de cómputo se había “caído” y que el presidente de este órgano llamo a la Secretaría Técnica para corregir la falla.
El aquél entonces Secretario de Gobernación y Director de la Comisión Federal de Electricidad Manuel Bartlett Díaz (actual Director también de la Comisión Federal de Electricidad) solicitó a todos los partidos políticos aceptar el “mandato de la voluntad popular.” Décadas después, al ser cuestionado por la tardanza en la entrega de los resultados de la elección Bartlett declaró: “Es un absurdo decir que se alteraron las computadoras. Que venía ganando Cuauhtémoc, que yo apagué la computadora y la prendí cuando empezó a ganar el PRI, eso es un cuento de hadas. Tenían toda la intención de echarme la culpa, después de una elección tan complicada. Era yo el chivo expiatorio” (Castro Sánchez, 2018).
Maquío estaba convencido de que México estaba cambiando, sin odio y sin violencia. Era indudable que el sistema democrático del país estaba obligado a cambiar.
Tras invitar a la resistencia civil pacífica para evitar el fraude electoral, la protesta de las calles se trasladó a la cámara de diputados con los recién electos Diputados de Acción Nacional, los cuales trataron de evitar que se consumará la imposición de Carlos Salinas de Gortari como Presidente de la República. Situación que era posible identificar como un reflejo de lo que ocurría en las calles del país. 

Además, Maquío organizó un referéndum para ver la tendencia real de la elección, invitando a los candidatos de oposición para formar una alianza contra la opresión del régimen, sin embargo, no fue suficiente.
Ante el inminente dictamen que declaraba a Salinas de Gortari como Presidente Electo, Maquío en coordinación con la bancada panista acudió a la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara el 8 de septiembre de 1988 para hacer un posicionamiento acerca de sus consideraciones sobre el camino que debería seguir el país. A pesar del esfuerzo realizado por denunciar el fraude, Salinas de Gortari es nombrado Presidente de la República.
En octubre de 1988 Maquío regresa a la escena política con una nueva consigna: impulsar una nueva Ley Electoral, que cambiara la vida política del país. Ante la negativa de trabajar la reforma electoral en el Congreso de la Unión, Maquío se puso en huelga de hambre en el Ángel de la Independencia el 15 de diciembre. Lo cual tuvo tal impacto social que logró que se acordaran las negociaciones para concretar la Reforma Electoral.
Para 1989 con su gabinete alternativo, Maquío se convirtió en un soldado más de la democracia, acción que mantuvo activa la vida política del partido en el país. Trabajó incansablemente dos puntos en particular, en primer lugar, dar seguimiento a los compromisos de la Reforma Electoral y en segundo impulsar los liderazgos regionales del partido, siendo un claro ejemplo de esto la influencia que tuvo para que Ernesto Ruffo Appel decidiera ser candidato a la gubernatura de Baja California y quien logró ser el Primer Gobernador de Baja California de un partido distinto al Partido oficial, revistiendo una gran relevancia al ser el primer triunfo de la oposición reconocido por el PRI. El esfuerzo de Maquío en la lucha democrática del país había sido sin duda un ingrediente definitivo para su logro.
Posteriormente se sumó al apoyo de las campañas de las presidencias municipales de Mazatlán y Culiacán, sin embargo, el 1° de octubre cuando acudía al cierre de campaña de Humberto Rice perdió la vida en un accidente automovilístico, junto al Diputado Javier Calvo Manrique. Accidente que, en palabras de sus hijos nunca existió, a Maquío lo mataron.
Murió el hombre, pero no el legado. Con solo 8 años de vida activa en la política de este país sembró la semilla que en el año 2000 cosecharía la democracia.
Manuel de Jesús Clouthier del Rincón defendió la idea de una relación activa y viva, en la que el gobierno debe hacer lo que le corresponde, fomentando en todo momento la participación ciudadana. Aun recordamos las palabras que empleaba con certeza y contundencia, en un entorno en el que siguen vigentes hoy más que nunca: “Tanta sociedad como sea posible y solamente tanto gobierno como sea necesario” (Ricardo, 1988).
Esta frase hace referencia sin duda alguna a la ideología del partido, la cual Manuel Gómez Morín visualizo durante la campaña de José Vasconcelos, “los males de México deben ser atacados de fondo y haciendo un llamado a los ciudadanos para que participen en forma permanente y organizada en la vida pública.” Esto concentra la ideología que no es ni liberal, ni conservadora, ni de derecha, ni de izquierda, es una ideología que se sustenta en principios que en México llamamos humanismo político. (Ramírez Rangel, 2013)
Maquío era un hombre con un tremendo coraje cívico que literalmente dio la vida por la democracia y la libertad. El dar a conocer su vida es un importante testimonio para todos los panistas y la ciudadanía misma, de la necesidad de volver a los orígenes, no para refugiarnos en las antiguas glorias, sino para reconstruirnos y reencontrar la misión que por primera vez se enunció aquel 15 de septiembre de 1939: “Por una patria ordena y generosa y una vida mejor y más digna para todos”.
El Maquío nos enseñó también a no rajarnos, el bien común era su motor y por eso entró a la política durante la crisis económica orquestada por las decisiones populistas de Echeverría y López Portillo a quienes enfrentó con decisión.
Su meteórica y acertada carrera política inspiró a muchos como Vicente Fox o Ernesto Ruffo, primeros en ser Gobernador y Presidente de la Nación que no eran surgidos del partido en el poder. También nos enseñó que en México hay dos tipos de mexicanos, aquellos que luchan y que ponen todo el empeño, que se preocupan y ocupan por sacar adelante el país y, por otro lado, a los que les dan tortibonos.
Nos enseñó que todos somos mexicanos y que nuestro fin común es México; que la patria es el apellido de todos, es lo que nos hermana. Que el principio de subsidiariedad debe persistir en todas nuestras actividades, que cada quien debe situarse en el máximo de sus responsabilidades; que se respeten tres principios fundamentales: el respeto a la dignidad del ser humano, la solidaridad, que es la suma de las voluntades por encima de las diferencias en búsqueda de un bien común y el principio de la subsidiariedad.
Nos enseñó también a entablar el dialogo de frente, a que debemos apoyar a todos los países que quieran ser libres y democráticos, que la democracia es balanceo de poder, que el pueblo debe tomar conciencia de su propio valor. Que autoridad es sinónimo de servicio y que solo tiene derecho a la autoridad aquel que está dispuesto a servir y servir bien a sus semejantes.
Que todo mundo debe participar en la reconstrucción de México y que esta decisión no recae en el Presidente de la República; que el cambio que nos ofrece no es un cambio de amo, es un cambio que nos permita dejar de ser perros. Que solo esta derrotado quien ha dejado de luchar, y el pueblo y con el pueblo estamos en pie de lucha.
Les voy q decir como dijo el Maquío, «los milagros existen, sí uno pone su parte, el de arriba siempre pone la suya, el problema es que nosotros no hemos querido poner la nuestra y a eso he venido a invitarte amigo a que pongas tu parte, a que luches en la trinchera que te dé la gana pero que luches, no te dejes, comprende que tú eres lo importante, que tú eres el que la tiene que hacer, y que tú la vas hacer, porque México va a cambiar, y va a cambiar contigo, va cambiar contra ti o va cambiar a pesar de ti, pero va a cambiar.”
Ante la situación que apremia en el país, hoy más que nunca los hombres que forjaron el espíritu y mística del partido son sin duda alguna referencia para encontrar las respuestas ante las claras muestras de que el autoritarismo quiere regresar a este país. Acción Nacional fiel a su historia tiene la obligación de volver al origen y de ahí partir, reconstruirse, para luchar por que se garantice la pluralidad y transparencia. Tiene la obligación también de ser aliado de la Sociedad Civil, de ser el partido que defienda el legado democrático que forjó en este país. Para recordarnos esto, tenemos grandes ejemplos como el del Maquío que hoy, está más vigente que nunca.
Referencias.
Castro Sánchez, A. (2018, agosto 01). El Universal. Consultado el 22 de abril de 2019, de https://www.eluniversal.com.mx/colaboracion/mochilazo-en-el-tiempo/nacion/sociedad/30-anos-del-fraude-electoral-de-1988
Nacional, P. A. (2014, julio 08). Youtube. Consultado el 11 de abril de 2019, de https://www.youtube.com/watch?v=gFM7nMitKZs
Ramírez Rangel, J. (2013, octubre 13). Vanguardia. Consultado el 22 de abril de 2019,
Ricardo, R. (1988). Youtube. Consultado el 22 de abril de 2019, de https://www.youtube.com/watch?v=B8y0dA8miOQ
[1] Esta referencia se hace en el artículo del Excélsior del 01/10/2014 de Gerardo Galarza con el título Tuvo Maquío meteórica y brillante carrera política. Recuperado el 23 de abril de 2019 de https://www.excelsior.com.mx/nacional/2014/10/01/984595
Ediciones Anteriores
Últimos artículos

EDITORIAL | TOMO 10
PorALEXANDRA DANIELA CID GONZÁLEZ publicado 2020-09-04 En
Recordar el mundo hasta antes de marzo de este año resulta extraño. De entonces a la fecha, las dudas remplazaron a las certezas y la creatividad se convirtió en una habilidad de supervivencia. La forma de relacionarnos con los demás, incluida nuestra propia familia cambió, nos adaptamos a demostrar afecto a través de la distancia, a trabajar en horarios y espacios compartidos, a encontrar nuevas formas de llevar sustento a casa.
México ha demostrado ser una sociedad resiliente. En medio de una de las épocas más dificiles en los últimos tiempos, que ha dejado a más de cincuenta mil familias de luto tan solo en los últimos meses, en una crisis que no solo es en materia de salud, sino económica y de seguridad, es posible ver ejemplos de personas trabajando por adaptarse al cambio y ayudar, en lo posible, a los demás.
Sin embargo, toda realidad tiene contrastes. Si bien el personal de salud, literalmente, está entregando la vida para luchar contra el virus que ha provocado la contingencia sanitaria, el sistema de salud tiene carencias no solo propias de vivir en una era de pandemia, sino que presenta carestías derivadas de políticas públicas sustentadas en un falso concepto de austeridad. Silvano Vitar explica las premisas sobre las que se fundamentan las políticas de austeridad y por qué y cómo estas al final, matan.
Dante Carrerón por su parte analiza las consecuencias que ha traido la extinción del seguro popular y la creación del INSABI y cómo esto ha influido en la difícil situación del sistema de salud en México.
En el mismo sentido, Pablo López de la Fundación Nariz Roja narra las decisiones que se tomaron para que al día de hoy, niños y niñas con cáncer sigan sufriendo de la falta de medicamentos en el país. Cuenta también acerca del esfuerzo que están haciendo desde esta Asociación Civil para recaudar fondos y apoyar a los padres y madres de familia en su lucha por el abasto de medicinas para sus hijos e hijas.
Por su parte Cristina Guzmán nos aproxima a comprender la realidad que viven las niñas y los niños con hipoacusia, una condición en muchos sentidos invisible. Lo cual, lo hace desde una perspectiva personal al narrar el camino que ha vivido con su hija, y ahora con familias como la suya, que trabajan unidas para lograr mejores condiciones de vida y oportunidades para sus hijos.
Martha Navarro reflexiona sobre los cambios en nuestros tiempos y se centra especialmente en el impacto que estos han tenido en la infancia en México. Le habla a padres y madres, a maestras y maestros, invintándoles a asumir una perspectiva de colaboración, orientada a la comprensión del otro, el cuidado y la búsqueda del bienestar común partiendo del autoconocimiento y la autoestima.
En otro orden de ideas, Alejandro Velázquez rememora cómo ha sido el camino hacia la ciudadanización de los organismos electorales, así como la importancia que tiene el defender su autonomía y por lo tanto, nuestra democracia.
Miguel Peñaflor por su parte analiza las redes sociales como medios de información alternativos y el papel que han tenido en el debilitamiento del monopolio de la información, en la transparencia y en las nuevas interacciones sociales.
En la sección Otras Latitudes, el Diputado argentino Álvaro Martínez identifica cómo en el transcurso de este tiempo, las instituciones democráticas en su país han sufrido distintos atropellos, producto de un enamoramiento de la cuarentena bajo la falsa dicotomía de salud o economía, la cual, nos dice, solo le es funcional a los gobernantes adictos al poder. Escenario que es posible identificar no solo en la Argentina.
Finalmente Camilo Arenas de Colombia, presenta un análisis de la forma en la cual están trabajando los Parlamentos Hispanoamericanos en tiempos de Covid, momento histórico que plantea nuevos desafíos en el uso de las tecnologías en las democracias modernas.
En este décimo tomo de Humanismo y Sociedad, buscamos presentar ejemplos sobre la aportación que se está haciendo desde la sociedad civil organizada a los grandes temas en el México de hoy, así como los cambios y embates que las instituciones democráticas están sufriendo en estos tiempos en América Latina.
Esperamos que todas estas reflexiones contribuyan a la tan necesaria discusión pública y permitan revalorar la aportación de la ciudadanía, así como identificar aquellos conceptos, políticas públicas, posturas y toma de decisiones que ponen en peligro las instituciones de nuestra vida democrática, para poder encontrar puntos de encuentro, hoy más necesarios que nunca.

MENSAJE DEL PRESIDENTE | TOMO 10
PorJUAN FRANCISCO AGUILAR publicado 2020-09-04 En
Al momento de escribir este mensaje, hay más de 55,000 muertes por Covid en México. Día con día se actualizan los datos oficiales en la conferencia del Subsecretario López Gatell, los Secretarios de Salud de los Estados rinden su propio informe y Google tiene un contador que actualiza la información de manera permanente. Invariablemente, los datos son diferentes.
Desde los gobiernos de los Estados se ha manifestado que las cifras presentadas no corresponden con las que ellos reportan, identificándose un desfase de hasta tres semanas y un sub registro de casos y fallecimientos en todo el territorio nacional.
La cantidad de contagios, de personas hospitalizadas -por lo tanto de camas disponibles- y de muertes se han convertido en un recuento automatizado, presente en el discurso diario de gobierno y en el de los medios de comunicación.
El 10 de agosto, cuando había 53,003 mexicanos muertos, el Presidente en su conferencia criticó el conteo de personas fallecidas que hacen los medios de comunicación, en el que se señala el lugar mundial que llevamos en el número de decesos, en el que se ubica a nuestro país en este tema, para al final, decir que esto es muy lamentable (el conteo, no las muertes) y explica lo que a su parecer es la razón de las críticas: “no les gusta el cambio”.
Esta frase resume la postura que el gobierno ha tomado al momento de asumir responsabilidades por el fracaso en la estrategia de salud frente al Covid, frente al desabasto de medicamentos para niños y niñas con cáncer, frente a los años más violentos en la historia del país, en suma, frente a todo.
Esa postura indolente, que no asume responsabilidades, que no muestra capacidad de escucha y de toma de decisiones para cambiar el rumbo frente al fracaso, se ha convertido en un signo característico de este gobierno.
Esta incapacidad para corregir es una negligencia que día a día cobra vidas. Lo que manifiestan al minimizar el conteo en el número de personas contagiadas y fallecidas, es que ven números, no nombres. Se les olvida que cada uno de los números que tanto les molesta que se sigan incrementando es un mexicano o mexicana, que son miles de familias en duelo.
Desde aquí envío mis condolencias a las familias de todos y todas aquellas personas que ya no están por esta terrible tragedia que estamos viviendo. Sirva también como modesto homenaje a las y los panistas a quienes extrañaremos. A las mujeres y hombres del país que se han ido en un corto tiempo por esta enfermedad. Recordamos sus nombres, son irremplazables.
#50milFamiliasdeLuto
#LutoNacional